La XI Cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) concluyó este fin de semana aquí con claras condenas a las políticas neocolonialistas de potencias occidentales que intentan empañar la soberanía regional.La cita del bloque integracionista convocada por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, también abordó aspectos como el blindaje económico de las naciones del área.
Dentro de las iniciativas anticolonialistas adoptadas este sábado y domingo en Caracas sobresale una declaración especial acerca del derecho inalienable del pueblo de Puerto Rico a su autodeterminación y su plena independencia.
Sobre ese tema, los jefes de Estado y Gobiernos destacaron que la causa de la independencia de Puerto Rico es un asunto que concierne a América Latina y el Caribe, y a sus foros de concertación y cooperación política, en especial la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
También sancionaron una declaración en respaldo a la legítima reclamación de Argentina al derecho a su soberanía sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes.
Al respecto, Chávez subrayó que serán estudiadas las sanciones que podría aplicar América Latina al Reino Unido por esta situación.
Sobre la base de las acciones colonialistas y de injerencia, ejecutadas por gobiernos europeos y Estados Unidos en el mundo, los líderes de la Alianza (...) propusieron la creación de un Consejo de Defensa común, cuyo funcionamiento será analizado en próximos encuentros.
Chávez, expresó la necesidad de que jefes militares de los territorios miembros de esa agrupación realicen reuniones en las cuales intercambien criterios sobre proyectos y ejecuten maniobras y entrenamientos conjuntos.
Esta iniciativa será discutida por el Consejo Político, integrado por los cancilleres del bloque, según aclaró.
Sobre ese tema, el mandatario boliviano, Evo Morales, abogó por desarrollar una doctrina antiimperialista que favorezca los intereses de los pueblos de la subregión y evite el establecimiento de bases militares en los territorios del área.
Del mismo modo, el presidente cubano, Raúl Castro, pidió concertar una cita previa que no solo reúna a los titulares de Defensa, sino a todos los responsables en el proceso de seguridad regional.
Mientras, el jefe de Estado nicaragüense, Daniel Ortega, instó a sus homólogos a agregar en la agenda de este nuevo Consejo como prioridad, la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado.
El canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, abogó por mantener la zona de paz, pero sin dejar de observas el escenario mundial y en particular se refirió al caso de Libia.
El sábado y el domingo, los líderes de las naciones de la ALBA y de otras invitadas, también aprobaron una resolución en demanda de la liberación inmediata de cinco antiterroristas cubanos condenados en Estados Unidos.
Un texto leído por Chávez, al respecto denuncia las crueles condiciones de encarcelamiento y las injustas sentencias a que fueron sometidos Gerardo Hernández, Ramón Labañino, René González, Antonio Guerrero, y Fernando González, quienes penetraron grupos de ultraderecha radicados en Miami que planificaban acciones criminales contra Cuba.
En la décimo primera Cumbre de la ALBA también quedó refrendada una condena a los ataques contra Siria, y a "los actos de violencia que grupos armados han desatado contra la población de esa nación".
En ese sentido rechazaron "la política sistemática de injerencia y desestabilización en la hermana República Árabe Siria", cuyo fin pretende imponer por la fuerza un cambio de régimen a ese pueblo.
Otro de los asuntos relevantes abordados en el cónclave resultó la aprobación de una zona económica común para los países integrantes de este mecanismo de complementariedad y solidaridad.
Con el tratado (Eco-ALBA), acordado por las ocho naciones del ente (Venezuela, Cuba, Antigua y Brabuda, Dominica, Bolivia, Nicaragua, Ecuador, San Vicente y las Granadinas), se impulsará el intercambio comercial en favor del desarrollo de los pueblos
Se acordó, la creación de un banco para este fin y destinar el uno por ciento de las reservas internacionales de cada nación integrante del bloque.
Ese fondo multilateral, ayudará a concretar el empleo de una moneda única, mediante el Sistema de Compensación Regional (Sucre).
También se acordó que los cancilleres de la Alianza se reúnan en Cuba próximamente para valorar decisiones ante la exclusión de la isla caribeña en la venidera Cumbre de las Américas.
El presidente venezolano propuso elevar una consulta a Colombia, organizador de la Cumbre de las Américas, para conocer si Cuba estaba o no invitado y en base a ello actuar en consecuencia.
Previo a esas declaraciones el dignatario ecuatoriano, Rafael Correa, propuso que la ALBA-TCP no acuda a Cartagena de Indias, en abril próximo, como muestra de rechazo a una medida injusta y excluyente, decisión que consideró debe debatirse en foros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y en el seno de la Celac.
"Tienen que asistir todos los países americanos a esa cumbre, ya basta de este anacronismo del siglo XXI", resaltó Correa.
En ese contexto, el mandatario boliviano, Evo Morales, instó a mantener una posición común entre los miembros del bloque lo cual asegurará que se defiendan los "sagrados intereses de América Latina y el Caribe".
mgt/dav
FUENTE: prensa-latina
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